jueves, 1 de febrero de 2018

Las remotas islas Molucas

Un poquito de historia no viene mal: corrían ansias coloniales a principio del siglo XVII en todo el globo por sacar provecho alrededor del mundo por parte de los europeos. De forma estrategica los ingleses cedieron las malucas a los holandeses a cambio de la isla de Manhattan( los british siempre mas listos).
En los siglos XVII y XVIII las especias que solo crecían en esta región del mundo tenían un valor incalculable en el mercado; estas eran clavo, pimienta y principal mente nuez moscada. A día de hoy sus habitantes siguen dedicandose a cultivar dichas especias, aunque tienen un valor muy bajo.
Siguiendo con mi viaje un vuelo nocturno con escala en makassar de 3 horas aterriza en Ambon cuando esta amaneciendo, autobús al centro y a descansar una vez encuentro hotel.
Ambon es fea y sus habitantes un poco bordes, aparte de no estar acostumbrados a ver turistas por  lares. Es curioso etnicamente el aspecto de la gente entre indonesio y papuo con toques filipinos.
Quedo atrapado 3 días en la ciudad por falta de ferries a mi objetivo, aquí no existe eso de alquilar motos por lo que me pateo cada barrio, excepto un bemo para visitar la isla. Me paso por el cementerio de la segunda guerra mundial, sus jardines deben ser lo único cuidado en esta urbe, quizá en honor a australianos y yankis caídos en combate.


El río que atraviesa ambon parece un río del norte de España con aguas cristalinas, como podéis apreciar en las siguientes imágenes ;-)

Por fin pillo el ferry al destino por excelencia en molucas, las islas Banda. Situadas en medio del mar de banda a 8-10 horas al sudeste de Ambon, o bien una hora en hidroavión si el tiempo lo permite.
Evito las colchonetas de los habitáculos con los pesados indonesios y me tumbo en un pasillo con moqueta, aquí solo tengo que aguantar a las cucarachas.
Nada mas llegar al puerto me aborda un chaval ofreciéndome guesthouse con muelle que da al mar, acepto ya que paso de dar vueltas con el cansancio. Voy derechito a visitar el fuerte Bélgica restaurado hace poco tiempo para sacar las perras al extranjero, desde el cual hay unas vistas magnificas del ferry que me ha traído a puerto.
Tal fuerte fue construido por los holandeses para defenderse de revueltas por parte de los bandaneros o rivalidades como con los ingleses, hasta que cedieron manhattan a cambio del control en molucas.

Echo un día en la vecina banda besar, mas virgen que banda naira sus habitantes son hospitalarios con vidas muy sencillas. Me interno en las primeras plantaciones de nuez moscada, los arboles no parecen tropicales mas bien tipo hayedos sin dejar crecer vegetación en el sotobosque. El aire esta impregnado de un olor muy singular debido a la especia mas valiosa del siglo xvii.

Las vistas de banda raya y el volcán Api( de los mas simétricos del mundo) es impresionante, una ladera carece de vegetación debido a la ultima erupción, es el volcán mas activo del este de indonesia.

Unos chavales me invitan a un fruto llamado jambu, son como manzanas rojas pequeñas agridulces, a cambio les di unos frutos secos que me sobran del desayuno.

A parte de las plantaciones de nuez moscada, Besar esta tupida de una selva impenetrable, la única zona transitable es el camino principal que bordea la costa norte y sus villas.

Desistí de hacer el trekking a la cima del gunug api por el clima revuelto, pero por fin hay barco publico a hatta island, la joya de la corona  para los amantes del submarinismo.
Hay un puñado de homestays en la villa según atracas en el muelle, y otro par al final del paseo camino a la nueva villa, que es donde me quedo. Desde nuestra playa habrá unos 100metros hasta llegar a la pared coralina que cae en picado a las profundidades, pero desde el muelle solo hay 20 metros con la orilla.
Al oeste de la villa continua la playa un km mas( esto es todo lo transitable de la islita), con unos atardeceres que ya quisieran muchas postales de ensueño.

Respecto al mar no tengo cámara acuática pero es el lugar que mas vida marina he visto con diferencia, las islas de Tailandia y malasia molan mucho pero este lugar es indescriptible, peces que no había visto nunca mas todos los que ya conocía. Incluso vi tiburones de punta negra fichandonos mutuamente, menos mal que son inofensivos porque estaba a mas de 100 metros de la orilla.
En el homestay conozco a una pareja argentina y un franchute con quienes sigo ruta juntos. Tomamos el ferry nocturno  de vuelta a Ambon se agradece la compañía, así los indonesios dan la chapa de forma repartida. Con suerte conectamos con barca rápida al amanecer a la isla de saparua, llevo dos semanas sin móvil medio improvisando pero esta gente dice que merece la pena y allá vamos.
Lo cierto es que el pueblo principal no merece mucho la pena, pero donde nos alojamos si el clásico lugar donde no hacer nada aparte de snorkel, hamaca, leer etc
Toca despedirse de esta isla de vuelta a ambon, el visado va a expirar y hay que ir dejando el país. En el embarcadero me echo unas risas con los hijos de las vendedoras de los stands

Otra jornada maratoniana de vuelos ambon-makassar-jakarta-kualalumpur me hace llegar k.o. con propósito de renovar la tecnología y mover el culo a mi siguiente destino......

No hay comentarios:

Publicar un comentario